En los últimos meses, productos que antes asociábamos únicamente al verano, como el puff de playa, han empezado a aparecer no solo en terrazas y jardines, sino también en salones y dormitorios. Esta tendencia forma parte del renovado interés por la decoración mediterránea, un estilo que apuesta por la luz natural, los materiales suaves y la simplicidad. Su crecimiento no es casual: responde a un cambio profundo en cómo las personas desean habitar sus hogares en 2025.
Un estilo de vida que prioriza la calma y la comodidad
Para muchos hogares, la casa se ha convertido en un refugio emocional. La vida acelerada, el teletrabajo y el deseo de disponer de espacios que aporten bienestar han impulsado la búsqueda de elementos confortables, versátiles y capaces de transformar cualquier estancia sin necesidad de grandes reformas.
En este contexto, los puffs dormitorio han pasado de ser un asiento informal a convertirse en piezas clave para crear rincones acogedores de lectura, espacios de meditación o zonas de descanso dentro del propio dormitorio. Su ligereza y adaptabilidad encajan con la tendencia actual de ambientes flexibles y experiencias sensoriales.
La revalorización de los materiales y la producción local
El auge del diseño sostenible también está impulsando este cambio. Los consumidores demandan:
- materiales duraderos
- tejidos suaves y lavables
- producción de proximidad
- estética cálida y natural
Muchas marcas españolas están liderando este movimiento con colecciones que combinan tradición textil, diseño contemporáneo y fabricación local. Esta apuesta por la calidad y la sostenibilidad se refleja en colores tierra, tonos lino, beiges, azules suaves y composiciones que evocan el Mediterráneo incluso en invierno.
Versatilidad como nuevo estándar en decoración
Uno de los factores que más influye en la popularidad de los puffs y cojines de suelo es su versatilidad. En un solo objeto, una persona puede encontrar:
- asiento para invitados
- apoyo para estiramientos o ejercicios de respiración
- elemento decorativo
- complemento para lectura
- punto de descanso en dormitorios pequeños
El puff de playa, por ejemplo, se ha convertido en un recurso sorprendente para interiores. Su peso ligero y su diseño mullido lo convierten en un aliado práctico para cualquier estancia: desde un salón minimalista hasta un dormitorio juvenil.
Hogares emocionalmente más inteligentes
Otra clave de esta tendencia es el concepto de “decoración emocional”, un enfoque que busca que los espacios ayuden a reducir estrés, mejorar el descanso y favorecer hábitos saludables. No se trata solo de estética: se trata de bienestar.
Los puffs, cojines de suelo y textiles mediterráneos permiten:
- crear ambientes de pausa
- facilitar posturas cómodas frente al teletrabajo
- generar zonas de calma sensorial
- potenciar la desconexión diaria
No es una casualidad que aumenten las búsquedas y compras relacionadas con rincones de lectura, zonas chill-out o pequeños espacios de relajación dentro de la vivienda.
El verano que se queda todo el año
Un fenómeno muy destacado de la decoración actual es que elementos tradicionalmente veraniegos se han integrado en la casa durante todo el año. El toque mediterráneo ya no se reserva para la estación cálida: ahora se usa para:
- generar luz en invierno
- aportar calidez visual
- suavizar ambientes nórdicos
- equilibrar líneas más modernas
El resultado son hogares que respiran serenidad sin importar la estación.
Mirando hacia 2026: la tendencia se afianza
Todo indica que estas corrientes seguirán creciendo. Los expertos en interiorismo apuntan que los próximos meses estarán marcados por:
- muebles ligeros y multifuncionales
- textiles duraderos y fáciles de lavar
- colores inspirados en la naturaleza
- recuperación de la artesanía española
- espacios híbridos entre trabajo, descanso y ocio
- más presencia de elementos blandos, modulables y sostenibles
Los puffs, tanto los diseñados para exterior como los pensados para interior, seguirán jugando un papel central en esta evolución hacia hogares más humanos y sensoriales.
Una transformación que va más allá de la estética
No estamos ante una moda pasajera. La forma de habitar el hogar ha cambiado y seguirá haciéndolo. Las personas buscan entornos que las acompañen emocionalmente, que aporten calma y que ofrezcan soluciones reales a sus rutinas diarias.
En este camino, elementos como los puffs dormitorio y los accesorios inspirados en el estilo mediterráneo demuestran que el diseño puede ser bello, práctico y emocional al mismo tiempo.





